miércoles, 28 de julio de 2010

Capricho

Eres mi capricho y nada más
una veleta que agita el viento
un desvelo contando sueños
y podrías ser la ruta errada
para que se esboce la tristeza
cuando se cuele tu ausencia
entre la puerta y el jardín
y la cama
la cocina.

Eras mi capricho, no más.