viernes, 25 de febrero de 2011

Ausente que te encuentro ausente
como el alba de los ocasos.
Y el cielo sigue escribiendo tu nombre
como si la amarga noche dejara
que te olvide como veneno que bebo a tragos
de manantial eterno del que gozo
el engaño de la sirena siendo la mar
un silencio y las rocas que muerden las olas...