Después de mucho tiempo sin publicar nada, casi un año, ya que la inspiración la suspendí o más bien, la suprimí como un medio de expresión y me dediqué a la vanidad del cuerpo, entiéndase, me metí al gimnasio. Aunque la espina estaba ahi doliendo cada vez más y de cuando en cuando sangraba en alguna hoja, ahora perdida entre las demás, o en post-it o cualquier materia lisa constituida por celulosa tratada. Esta mañana en la camioneta llevaba un parche de lo que sería algo parecido a un poema de poca monta con la calidad de un estudiante de primaria.
Werever (no pido disculpas por mi espanglish), vino en calidad de extrangera la inspiración y solo seguí su rumbo. Así que dejenme ser, let me be.
Let me love you
no chains
no matter the future
Let me know your name
your home
your warm bed
or the cataclismic cold in your heart
Let me now
start the feeling
Let me now
go away
Let me alone
but let me
remember your love.