martes, 7 de febrero de 2006

D sábado 04.02.2006

Llegará hasta mi, pasará a mi lado y un instante antes de verme perder la mirada cómplice su mano tomará mi brazo como un saludo que mi cuerpo siempre ha conocido y nunca se le ha dado. Importa nada lo que siguea ese gesto, su sonrisa y la mía, una lágrima última por la razón equivocada, un saludo sin lugar ni oídos, pero sí un saludo al inicio de nuestras vidas juntos.